Un saludo amigo(a), en el año 1991 lleve a
mi esposa a una operación experimental al hospital Frank País de La Habana, yo
estuve 25 días en los cuales observe los niveles de miseria y opresión en que
vivía ese momento el pueblo cubano; vi como todos los medios de comunicación
alababan la gestión del "Comandante Fidel" y la grosera propaganda
que el régimen hacía para alabar las pocas acciones positivas dentro de ese mar
de destrucción. Por ejemplo: Una cooperativa agrícola "presuntamente"
había logrado ser la mejor en producir caña de azúcar, le hacían la entrega de
un banderín y eso lo pasaban en cadena nacional. Pero la verdad es que el
régimen al igual que aquí destruyó el aparato productivo y a pesar que
exportaban azúcar antes de la revolución castrista, hoy no se abastece ni su
propio consumo.
En el país está casi establecido ese esquema
"castrista", para poder lograrlo están usando el poder del dinero
extraído de PDVSA a costa del desmoronamiento de esa empresa, entrenaron y
promovieron bandas armadas que actúan impunemente por todo el país como en su
época los camisas pardas de Mussolini, el jefe del régimen y su secuaz de la
Asamblea Nacional andan inventando actos para embelesar a la población y usan a
los tribunales para neutralizar de cualquier forma a quienes en los demócratas
asumen algún papel protagónico. El estado de descomposición de la sociedad y la
anarquía promovida como forma de vida, la polinización de las Fuerzas Armadas,
único factor con posibilidades de detener este cáncer.
Lo que está pasando da destellos de
fortaleza y no pareciera que tiene salidas; esto no es una dictadura firmemente
establecida, un presenta muchas muestras de debilidad, las cuales debemos usar
para desocuparlos del poder. Para ello los demócratas debemos organizarnos,
fortalecernos y establecer planes de acción que permitan motivar a la población
en el proceso de organización y lucha; hacerles sentir a los venezolanos que SI
tenemos opción y que hagamos un esfuerzo conjunto para afianzar un nuevo
gobierno demócrata y comenzar la reconstrucción del país. La tarea es difícil,
pero debemos hacerla para en adelante vivir en paz, bienestar y progreso.
Carlos
Guyón
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